PPCV, HISTORIA DE UNA TRAICIÓN

El Partido Popular de la Comunidad Valenciana es la formación política experta en tomar el pelo a los valencianos y utilizarlos como moneda de cambio en sus conchabeos electoralistas con el separatismo catalán.

Esta historia comienza en las elecciones generales del año 1996: el PP se alzaba con la victoria. No obstante, al no hacerse con la mayoría absoluta, decidió echarse en los brazos de los “recogenueces” del PNV de Arzalluz y de los separatistas de la CiU de Jordi Pujol.

Con respectó al presidente catalán, Aznar signó el llamado ‘Pacto del Majestic’, por el cual colmaba de competencias y privilegios – utilizados en el ‘Procés’ – a la autonomía catalana y eliminaba el servicio militar.

Sin embargo, en esas mismas fechas firmó un pacto semi oculto con el mismo Pujol, por el cual éste exigía a cambio de su voto en el Congreso la cesión de facto a la Generalidad de Cataluña de la educación valenciana. Este es el llamado ‘Pacto de Reus’.

En virtud de este vergonzante pacto entre los gobiernos de Pujol y Zaplana, redactado por el entonces Consejero de Educación y Cultura, el popular Fernando Villalonga – como él reconoció en el año 2004 –, el Consell valenciano se comprometía a crear la AVL (Academia Valenciana de la Lengua), que dependería del IEC (Instituto de Estudios Catalanes) y que, en contraposición a la histórica y españolista RACV (Real Academia de Cultura Valenciana) normativizaría la lengua valenciana – poseedora de doble siglo de oro – para convertirla en un artificial dialecto del catalán con el que aislar progresivamente al español de la vida pública de los valencianos.

Dicho ente pancatalanista fue creado oficialmente en el año 2001 y en el año 2006 – gobernando Francisco Camps –, PP y PSOE (ambas patas del corrupto Régimen del 78) pactaron la reforma del Estatuto valenciano. En dicha reformulación legal, el bipartidismo blindaba la AVL, por lo que para su derogación se ha de contar con dos tercios de Las Cortes Valencianas. Además, esta reforma conllevó, a su vez, la degradación de nuestra querida Región Valenciana, pues pasó a considerarse “nacionalidad histórica”, cuando no hay nada más grande para una tierra que ser una región histórica de la más grande y mejor nación del mundo: España.


No termina aquí la espiral de infamias contra la identidad de los valencianos a través del ataque a dos de sus elementos – en este caso inmateriales – que constituyen el hondo y firme espíritu de su esencia tradicional: sus dos lenguas propias, español y valenciano. Y es que en el año 2005 el entonces portavoz del gobierno valenciano, el popular Esteban González Pons, firmó el llamado ‘Pacto de Barcelona’, por el que se establecía que el catalán era la “lengua común” entre Valencia y Cataluña. Un mes después, en febrero, la AVL emitía un dictamen ratificando esta afirmación y Pons aseguraba que el gobierno valenciano se hallaba «plenamente satisfecho» con esta decisión.

A todo ello han de sumarse las subvenciones con las que el PPCV ha regado a asociaciones pancatalanistas, tanto desde la Generalidad, las tres Diputaciones y decenas de Ayuntamientos valencianos.

En definitiva, una auténtica tomadura de pelo y falta de respeto a todos aquellos valencianos que confiaban en el PPCV para parar las ansias expansionistas del separatismo catalán.

Este próximo domingo 28 de mayo, todos los valencianos: desde la Vega Baja hasta el Bajo Maestrazgo; desde el Pilar de la Horada hasta la Pobla de Benifassà, tienen una inmejorable oportunidad para hacer pagar en las urnas al PP todas estas traiciones.

¡No mos fareu catalans!

Pedro Beigi Gutiérrez. Responsable del área cultural, jefe de campaña y número 6 en la lista de VOX en Villajoyosa.